«Ni una escalera
Para poder alcanzarte
Ni una pistola
Para poder gobernarte»
(Ingobernable, C. Tangana)
Una semana ha pasado desde el terremoto político que tuvo como hipocentro la región de Murcia con la moción de censura (después fallida) que hizo tambalear los pactos entre PP y Ciudadanos. Los estragos parecen no cesar en Madrid, que ya se ha convertido en el epicentro del seísmo. Isabel Díaz Ayuso, hasta ahora presidenta de la Comunidad, convocó elecciones, rompiendo con Ciudadanos y apostando todo a esa posible mayoría absoluta el 4 de mayo.
Y de repente, Pablo Iglesias, ‘El Madrileño’, vicepresidente del Gobierno, anuncia su dimisión como ministro y, a su vez presenta su candidatura en la Comunidad de Madrid para esos comicios tan buscados por el PP, por el denominado ayusazo.
«Esto no es más que otro sarao
En el que te has colao
Con un traje alquilao
Ni siquiera me han nominao
Cuando paso a su lao
¿Qué coño le ha pasao?«
(Nominao, C. Tangana)
Se avecina un cara a cara entre Iglesias y Ayuso, “comunismo o libertad”, según los bannonistas, Godzilla vs King Kong, según los cinéfilos. ¿Qué consecuencias tiene este movimiento? ¿Habrá partido? ¿Queda condenada la Comunidad de Madrid a las garras de Ayuso? ¿Qué pasará con Unidas Podemos?
En Unidas Podemos
Iglesias ha anunciado que la ministra de trabajo Yolanda Díaz sería su relevo en la vicepresidencia del Gobierno, así como que Ione Belarra ocupara su ministerio de Derechos Sociales. Del mismo modo ha colocado a Díaz como su propuesta para liderar la formación morada. Es decir, Yolanda Diaz, a priori, es la apuesta para las próximas elecciones generales. Lo que supone un cambio de rumbo en el partido del círculo, que estaba teniendo aires caciquistas desde hace tiempo.
Parecen buenas noticias para el partido, la candidatura desgastada de Pablo Iglesias se renueva con una Yolanda Díaz que está ganando relevancia política a base de buen hacer, con actos, negociaciones y transversalidad desde la izquierda, más que con verborrea. El movimiento estratégico hacia dentro parece sumar, en principio.
En Madrid
Tras el ajustado resultado de Unidas Podemos en las pasadas elecciones madrileñas (casi no llegan al 5% mínimo para entrar en el gobierno de la Comunidad), la formación morada necesitaba un golpe de efecto para movilizar el voto, más sabiendo que Ángel Gabilondo repetirá candidatura con el PSOE y que, salvo sorpresas de última hora, seguirá haciendo gala de sus carencia carismática, que lejos de avergonzarle, parece llevar esa inutilidad política por bandera: mesura desmesurada e invisibilidad, falta de oposición, falta de confrontación. Además, Iglesias, en su comunicado, ha tendido la mano a Más País (O Más Madrid o Más Errejón) a formar una candidatura conjunta, Ironman tendiendo la mano al Capitán América para enfrentarse a Thanos.
¿Ahora qué?
La suma de Pablo Iglesias a la carrera electoral va a tener un efecto claro: la polarización de las elecciones, y, por ende, de la sociedad madrileña. Ayuso por fin tiene un oponente, y no cualquiera. ¿A quién va a beneficiar este movimiento? en principio la lógica nos llevaría a pensar que con una candidatura tan potente como la de Iglesias, Ayuso lo tendría que tener más difícil que nunca, pero, ¿mantiene Iglesias su capacidad de movilización?, ¿o por el contrario es una candidatura en descomposición? Al igual que Trump prefería enfrentarse a Sanders, ya que este movilizaba a el electorado republicano por mera contraposición, Ayuso debe estar frotándose las manos al tener no cualquier enemigo, sino a El Enemigo. Pablo Iglesias aúna en su figura todo contra lo que la derecha y la extrema derecha se han estado enfrentando en los últimos años, lo que le hace un perfecto catalizador para el voto de PP y a Vox, de ahí el cambio de “socialismo o libertad” a “comunismo o libertad”: el enemigo es mayor, más malo, y más sangriento que nunca. El otro agrupa al nosotros. La derecha cierra filas y se moviliza contra el vicepandemias.
«Me cago en las personas que se rajan
Muy antes de que se acabe la noche
Peinábamos perico con navaja
En el salpicadero de tu coche«
(Hong Kong, C. Tangana)
¿Será capaz Iglesias de ilusionar a la izquierda madrileña?, ¿o le estará dando dos pistolas cargadas a un mono?
Comunismo o libertad. 4 de mayo. Tú decides.