Pablo Hasél ha sido condenado a una pena de prisión por enaltecimiento del terrorismo e injurias contra la Corona, a lo que se le suma otros tantos juicios pendientes por militancia política que podrían llevarle a estar encarcelado hasta 15 años.
Aquí tienes disponible la primera parte de la entrevista
-¿Se alegra de la ruptura de Podemos?
Sí, cuanto más debilitada quede una de las mayores farsas de la historia, mejor. El daño que han hecho alejando la rabia y la lucha de las calles, estafando a personas desesperadas, blanqueando a nuestros opresores y criminalizando a revolucionarios, es para… me callo, que no hay libertad de expresión. Sus peleas internas no son por motivos ideológicos, son por sillones, como asquerosos trepas que son.
-¿Cómo explicaría, usted que ha conocido desde dentro sus entresijos, la libertad de expresión y su desbordamiento en los Tribunales? ¿Existe la politización del Poder Judicial?
En este régimen no hay libertad de expresión para nosotros. Si siempre que decimos verdades sobre la monarquía, sobre los cuerpos represivos o los presos políticos somos detenidos y condenados significa que la libertad de expresión no existe.
Los tribunales del Estado son herencia directa del Tribunal del Orden Público de la época de Franco y con un objetivo claro: la represión al antifascismo. Sus jueces responden a los mismos intereses y es absurdo esperar que sean imparciales.
-Valtonyc, Pablo Hasél, Cassandra,… ¿Se imagina a Federico Jiménez Losantos siendo objeto de crítica, temiendo por su imagen pública o haciendo las maletas? ¿Cuál es el problema social estructural que desequilibra la balanza?
Federeico Jiménez Losantos es un fascista y, lógicamente, unos tribunales fascistas no encarcelaran a personas fascistas, por eso él puede decir que habría que bombardear Barcelona con total impunidad. Hasta que no acabemos con este régimen, tribunales y cuerpos represivos esta represión se perpetuará.
Se creyeron el cuento de que en la «transición» se dio paso a una democracia, cuando sucedió todo lo contrario. Las libertades y derechos democráticos que el fascismo arrasó en en 1939 no los hemos recuperado, por eso estamos como estamos.
Cabe recordar, porque hay mucha confusión al respecto, que no nos condenan con la Ley Mordaza. Nos aplican el viejo Código Penal. Pero PSOE y Podemos querían vender que todo era culpa de la Ley Mordaza del PP que ni siquiera han derogado pese a prometerlo incontables ocasiones.
-Muchos politólogos, periodistas y sociólogos afirman que ellos ya veían venir un auge en la extrema derecha en el Estado español. ¿Cabría la posibilidad de que se conforme un grupo de resistencia y rechazo, o incluso un movimiento violento, si VOX entra con plenitud en el Parlamento?
La extrema derecha no tiene ningún auge, controlan desde 1939 los pilares del Estado. ¿Los jueces y fiscales de la Audiencia Nazi-onal están en auge ahora? No, lo han estado siempre. VOX es, además de una escisión del PP, una maniobra del régimen para blanquear al resto de partidos y que parezcan muy distintos o mejores. El mierda de Pablo Iglesias dice que hasta el PP es moderado. ¡El PP moderado!. Hablar de VOX como si el fascismo empezara ahora es faltar al respeto a sus víctimas y caer en el simplismo.
-¿La exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos cerraría heridas del franquismo?
No, es una operación de marketing del PSOE que ni siquiera han cumplido. Las heridas jamás se cerrarán mientras no haya justicia. Más que exhumar a Franco, sería necesario acabar con todo su legado como los tribunales, cuerpos represivos, oligarquía, bandera, legalidad, etc. Pero el PSOE jamás estará dispuesto a ello y los defiende, como tantas calles dedicadas a criminales fascistas o herencia fascista.
¿Cómo está viviendo la proclamación de Guaido y el apoyo internacional que ha recibido?
Me desespera la facilidad que tiene el imperialismo, por controlar los mass media, para intoxicar a la población y legitimar sus injerencias o invasiones. Con Venezuela la intoxicación ha sido aún peor y el PSOE ha contribuido.
-Gracias por la entrevista, Pablo Hasél.
A vosotros.