La madrugada del 8 de julio de 1994, dos horas después de la media noche, Pyongyang vio, por última vez y por mucho tiempo, ponerse el sol. Kim Il-Sung había muerto de un ataque al corazón.
La madrugada del 8 de julio de 1994, dos horas después de la media noche, Pyongyang vio, por última vez y por mucho tiempo, ponerse el sol. Kim Il-Sung había muerto de un ataque al corazón.