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Estos últimos días hemos visto cómo se ha reavivado el enfrentamiento entre salas y plataformas. La estrategia económica de Warner Bros podría poner a las salas de cine en jaque el próximo 2021. Y es que el equilibrio entre estas dos formas de consumir cine, que parece que se había alcanzado en 2019, con la pandemia se ha vuelto a abrir y esta vez está siendo una sangría.
Para muchos la noticia de que Warner estrenará todas sus películas simultáneamente en cines y HBO Max en 2021, es la estocada final al cine en gran pantalla, cuya situación ya veníamos tachando de agónica (96% de las salas al borde de la quiebra). Un total de 17 películas verán la luz simultáneamente en las salas y en esta plataforma en Estados Unidos el año que viene. La lección aprendida con el estreno de “Mulan” (2020) en la plataforma Disney+, fue que esto supondrá un repunte de la piratería, ya que el remake del clásico animado inundó las páginas pirata a los pocos minutos de ser estrenada.
Hasta ahora plataformas y salas se habían complementado. No tenían una competencia directa, pero en 2021 debido al precedente que ha establecido Warner Bros, la competencia empezará a ser directa y ya podemos imaginar quién será el perdedor.
Tras un mes de octubre con los últimos estrenos importantes de este 2020, muchos de ellos procedentes de festivales como el de San Sebastián, nos hemos quedado con un noviembre sin grandes novedades. Las pocas que ha habido han sido gracias a los últimos estrenos de Netflix y sobre todo, a la vuelta del director de “La red social” (2010) David Fincher.
CINE NACIONAL
La película protagonizada por Antonio de la Torre y Belén Cuesta ha sido la seleccionada para representar a España en la 93º edición de los premios Oscar que tendrá lugar el 25 de abril de 2021. “La trinchera infinita” (2019) es la elegida dejando fuera de la carrera a la gallega “O que arde” (2019) y a la asfixiante “El Hoyo” (2019). El filme dirigido a tres manos por Aitor Arregi, Jon Garaño y Jose Mari Goenaga sobre la guerra civil es la apuesta para intentar alzarse con la estatuilla en el prestigioso certamen. Una película sobre el confinamiento, aunque de otro tipo. Nos cuenta la historia de los topos, disidentes y rivales políticos del régimen franquista que se vieron obligados a vivir en las sombras, entre paredes, a la espera de tiempos mejores.
La novedad de este mes en el terreno nacional viene de la mano de Prime Video con la vuelta de Javier Fresser tras el exitazo que fue “Campeones» (2018) galardonada con él Goya a la mejor película en 2019. “Historias lamentables” es una película dividida en cuatro tramas variopintas con leves nexos de unión. Una comedia que abraza el absurdo, pero que no consigue mantener tu atención durante los 126 minutos de metraje.
Si bien cuenta con momentos divertidos e historias interesantes, el apostar por distintas tramas prácticamente inconexas hace que la película sea muy irregular. Los personajes exagerados que encajan bien en una comedia sin pretensiones, pero que cojean en los momentos en los que parece que el director quiere introducir pequeñas reflexiones morales, que por otra parte, no se sabe muy bien cuáles son. Mosquea especialmente la trama de Ayoud (Matías Janick) y Tina (Laura Gómez-Lacueva), tal vez porque sea la más realista, dentro de la exageración y por que se resuelve con una especie de happy end que tira por tierra la aparente critica social que creo que pretendía.
CINE INTERNACIONAL
En el panorama internacional, los estrenos son principalmente europeos como es el caso de las dos películas de las que hablaremos, una llega desde el festival de Berlín, la otra es un biopic de uno de los grandes personajes del siglo XX en Francia.
“Undine» del director alemán Christian Petzold nos habla del amor y la pérdida, la ruptura y el seguir hacia delante. La actriz principal, Paula Beer, se alzó con el Oso de plata en el festival de la capital alemana con su emotiva interpretación de esta mujer abandonada por su pareja llamada Undine. La película juega con lo real y lo imaginario dándole momentos oníricos y surrealistas con algún toque de terror y tensión. El mayor problema que presenta el largometraje es su marcada línea festivalera, es decir, se nota que es un indie con un estilo muy en la senda de películas de festivales europeos. Muchas veces no están pensadas para el gran público. Esto hace que la historia de amor que pretende contar, el fondo, se vea empañada por su forma, que no deja de ser tramposa, ya que no suma a la trama y no transmite más que confusión.
Gabriel Le Bomin nos trae “De Gaulle”, un largometraje que seguirá los pasos de la familia De Gaulle durante los periodos de enfrentamiento en terreno francés contra la Alemania Nazi. Un retrato de las consecuencias de la invasión nacionalsocialista en dos esferas, la primera en los altos mandos políticos y marciales y la segunda siguiendo la huida de la familia del general.
Le Bomin nos retrata al que después sería Presidente francés en sus inicios en la política, cuando es nombrado ministro y se le encarga parlamentar con el primer ministro británico Churchill. Además de cómo después, tras vencer dentro del gobierno francés los partidarios de finalizar la guerra, De Gaulle desde Reino Unido se alzaría como líder de la Francia Libre. Un retrato político que intenta paliar su frialdad con una historia paralela de Yvonne de Gaulle la cual meterá las notas emotivas. Estas interrumpen constantemente con el relato histórico. El drama surge de la huida de una familia aburguesada cuyo clímax dramático se da cuando se tienen que unir en la huida con la gente de a pie (problemas de ricos). Un retrato heroico al más estilo estadounidense que vanagloria la figura del que tuvo que renunciar al cargo de presidente tras perder la legitimidad frente a las revueltas de Mayo del 68.
CINE EN CASA
Netflix en este último mes ha estrenado las que eran llamadas a ser las grandes apuestas para la temporada de premios. Las que se sumarían a la magnifica «El juicio de los 7 de Chicago» (2020) en la carrera por los premios.
“Hillbilly Elegy” del ganador de un Oscar Ron Howard (“Una mente maravillosa”) es la adaptación de una historia real sobre la familia, las consecuencias de la drogadicción y el superar las circunstancias (muy en la línea del American Dream). Glenn Close y Amy Adams eran la principal atracción de la película, una abuela con mucho carácter y una madre con problemas con las drogas, unidas a una buena caracterización, hizo que las redes las colocaran a la cabeza de las quinielas. Era la formula perfecta para que estas dos grandes actrices optaran por la estatuilla. Pero las primeras críticas profesionales la hundieron y después al público tampoco convenció. Lo que parece que aleja sus protagonistas de la temporada de premios.
La película hace aguas por varias partes, lo que más sorprende es la torpe dirección de Howard que hace que la narrativa tropiece constantemente con una sobrecarga de flashbacks. También la película desaprovecha con personajes difusos a sus dos grandes estrellas. Close, al principio, parece una caricatura. Cuando llega el momento dramático es imposible tomarla en serio, pese a que está correcta. Adams, por su parte, tiene un personaje tan insoportable y mal desarrollado que no tiene margen para destacar. Puede que a falta de otras actuaciones destacables se cuele en la temporada de premios, pero en otros momentos hubieran pasado sin pena ni gloria.
David Fincher
El ansiado regreso de David Fincher nos trae “Mank” una cinta en blanco y negro que pretende contarnos la historia tras el guion de, para muchos, una de las mejores películas de la historia del cine, “Ciudadano Kane” (1941). Seguramente uno de los proyectos más personales del director de “Se7en” (1995) ya que el texto corre a cargo de su padre. El fallecido en 2003, Jack Fincher.
La gran vuelta, seis años después de “Perdida” (2014) que pasó, más bien, desapercibida, con una película que olía a cine de los años 30-40 estaba destinada a ser el estreno del año. La cinta tiene un envoltorio impecable, una fotografía exquisita, un manejo del ritmo bueno, una dirección fluida, pero se pierde en lo que nos quiere contar. La historia que se construye a través de flashbacks abarca todo el espectro de la vida social y política cercana al Hollywood de aquella época, los guionistas, la relación con las grandes majors, la influencia de la política en el cine y del cine en la política. Todo a través del personaje interpretado por un correcto Gary Oldman. Si el principal propósito de la película era hablarnos de la polémica escritura del guion de “Citizen Kane”, fracasa estrepitosamente ya que carece de interés en la película. Si trata de hacer una especie de crónica política de la época, también fracasa porque se trata de forma superficial y secundaria.
Por lo que tenemos unas dos horas y cuarto de una buena película que no sabe lo que nos quiere contar. Una cinta que casi arrasa entre los críticos y que está dejando bastante frío al público general. Probablemente Fincher logre la merecida estatuilla, pero con una película que está muy lejos de sus grandes obras.